Terapia preventiva inmunológica
La Ozonoterapia es un conjunto de técnicas que utilizan el ozono como agente terapéutico en un gran número de dolencias.
A pesar de que desde el 1960 ya se describe su utilización en nuestro país, no es hasta el año 1999 cuando la medicina alopática empieza a hacer uso, raíz de la evidencia de mejora en determinadas dolencias como la hernia discal y la artrosis de cadera.
Es un tratamiento natural con pocas contraindicaciones y mínimos efectos secundarios. Actualmente se utiliza en 24 hospitales públicos del país según indica la SEOT (Sociedad Española de Ozonoterapia).
Se trata de una terapia bioxidante, que acelera el metabolismo y estimula la liberación de los átomos de oxígeno. Cuando se incrementan sus niveles, disminuye el potencial de dolencias, y fluyen grandes cantidades de oxígeno dentro del organismo.
Produce efectos antiinflamatorios y analgésicos, pero también, antifúngicos, antivíricos y es bactericida, puesto que produce peróxido, una sustancia que destruye virus, bacterias y hongos.
Hace que las células sanas sean capaces de multiplicarse más rápidamente y como resultado se consigue una modulación del sistema inmunológico.
Desde el punto de vista clínico, la Ozonoterapia no tiene efectos colaterales tóxicos al asociarse a otros tratamientos. Consiste en un tratamiento complementario a cualquier otra aplicación médica.
Se recomienda su uso como terapia preventiva inmunológica.
Aunque no hay evidencia científica concluyente que tenga efectos positivos en relación al Covid-19, se han iniciado dos ensayos clínicos para valorar su eficacia.